En el proceso de laminación dos o más substratos se unen mediante la acción de un adhesivo compatible con ambas películas. Los adhesivos pueden ser del tipo “solvente” que se diluyen en un disolvente orgánico para su aplicación o adhesivos fluidos que no requieren uso de solvente “solventless”.
Las líneas de laminación están equipadas con desenrolladores para cada uno de los substratos, unidades de aplicación controlada de solventes, rodillos presores que realizan la laminación y una unidad de enrollado de la estructura laminada.
El proceso de laminación confiere propiedades a la estructura laminada tales como, mejores propiedades mecánicas, barreras a gases y humedad, alta resistencia térmica, resistencia química, sellabilidad de alto desempeño, protección de la impresión, imágenes brillantes o mates.